Tengo la dualidad. Por un lado a mi parte más purista no le entra bien que el skate se encarrile como un fútbol o un lanzamiento de martillo, genera visibilidad forzada, grandes marcas, mucho dinero y menor carácter genuino para nuestra cultura. Por el otro la libertad es un derecho, quienes vamos a ser nosotros para juzgarla?
Compra local, patina global.
ra.